10 series para mejorar vuestro nivel de inglés (B1)

¡Hola, pompeynianos!

Hoy os traigo una entrada algo diferente en cuanto a temática, y está estrechamente relacionada con una de las inquietudes que tienen todos los que, por alguna razón, deciden irse a Reino Unido: mejorar el nivel de inglés. Mis alumnos siempre me preguntan en clase qué pueden hacer por su cuenta para seguir avanzando, y yo siempre les digo lo mismo: ver series y películas.

No solo podéis mejorar vuestro oído viendo series y películas, sino que también enriqueceréis vuestro vocabulario, ganaréis en pronunciación y, gracias a los subtítulos en inglés, desarrollaréis una mayor capacidad de lectura y escritura. Lo mejor de todo es que no os costará tanto trabajo lograr todo esto, puesto que el componente de motivación ya lo tenéis asegurado.

En esta entrada os propongo diez series para mejorar vuestro nivel de inglés, en concreto si tenéis un nivel A2-B1 y queréis obtener un certificado PET o ISE I. Por supuesto, estas son las series que yo conozco y que he analizado para este nivel, pero no se tratan de las únicas que podéis ver. De hecho, si habéis visto alguna otra que no se encuentra en esta lista, podéis compartirla en los comentarios. 🙂 ¡Soy toda oídos!

Antes de empezar con la lista, querría aclarar que estas series solo os serán de utilidad si las veis como mínimo con subtítulos en inglés. Me temo que no sirve de nada verlas con subtítulos en castellano. Por supuesto, si os atrevéis siempre podéis suprimir los subtítulos, pero no os lo aconsejaría para este nivel en concreto.

13 reasons why

Empezamos con una serie que viene pisando fuerte. Prácticamente todos mis alumnos (¿a quién quiero engañar? No solo mis alumnos, todo el mundo parece haber visto esta serie) se han enganchado a esta serie, así que no he podido resistirme.

13 reasons why cuenta la historia de Hannah Baker, una adolescente que decide suicidarse. Semanas después de este acontecimiento, uno de sus compañeros de clase recibe una caja en la que encuentra unas grabaciones hechas por Hannah poco antes de morir, en las que ésta explica por qué se quitó la vida. Cada cinta va dirigida a una persona distinta y detalla cómo cada una de ellas tuvo implicación en su depresión y, finalmente, suicidio.

La serie ha sido producida, entre otras personas, por Selena Gómez para Netflix y va a tener segunda temporada. Los actores no hablan demasiado rápido y la gramática y el vocabulario empleados en los diálogos no son muy complicados, por lo que se trata de una buena opción para este nivel.

Blackadder

¿Os interesa la historia de Reino Unido? Seguro que como buenos pompeynianos o residentes en otras ciudades británicas, este tema puede que os llame la atención. Y si simplemente estáis en vuestros países de origen y estudiáis inglés, la historia es un buen vehículo para aproximaros a la lengua de Shakespeare. Para ello, una buena idea sería la serie Blackadder, producida por la BBC y emitida en la década de los 80. En ella, un viejo conocido de la ficción británica como es Rowan Atkinson (célebre por su caracterización de Mr Bean y por aparecer en películas como Love Actually Johnny English) nos introduce en diversas etapas de la historia británica de la mano de diversos personajes. Atkinson interpreta a Blackadder, un mismo personaje que aparece en todas las temporadas, correspondientes a su vez a una época histórica diferente. Lo hace acompañado de otros personajes también presentes a lo largo de toda la serie y de otros que se van sucediendo cada temporada, entre los cuales encontramos rostros tan conocidos como los de Stephen Fry y Hugh Laurie (el famoso Doctor House).

Dado que se trata de una comedia, el objetivo de Blackadder es hacer reír con un humor de lo más puramente británico. Si eres aficionado a este tipo de humor, que no te quepa duda alguna de que esta es tu serie. Bien es cierto que los diálogos se caracterizan por una velocidad algo elevada, por lo que los subtítulos a este nivel son imprescindibles para que no haya pérdidas en la comprensión y para disfrutar por completo de la serie, aunque sí que hay que reconocer la ayuda que supone la dicción de los personajes,  que sin duda os ayudarán a entender y a mejorar vuestra pronunciación.

Call the Midwife

La trama de Call the Midwife es simple: Jenny Lee es una joven enfermera que llega a una de las zonas más pobres y conflictivas del Londres de los años 50: East End. Allí empezará a trabajar como comadrona junto a las monjas del convento de Nonnatus House y otras enfermeras. Una de las caras más populares de la serie es la del personaje de Miranda Hart, actriz conocida principalmente por su propio programa en la televisión británica, Miranda.

El lenguaje empleado en la serie es en su mayoría simple, y los acentos no son muy marcados, lo cual os ayudará bastante a la hora de escuchar y entender los diálogos.

Doctor Who

Doctor Who es una de las series más famosas del Reino Unido, y quizá también del mundo. Lleva más de cincuenta años en antena, con tramas y personajes distintos en cada una de sus temporadas.

La trama principal se centra en el personaje del doctor, de nombre desconocido: un alienígena que se dedica a viajar en el tiempo con su Tardis para resolver misterios y ayudar a quien le necesite. El doctor se reencarna en distintas figuras a lo largo de la serie y cuenta con la ayuda de sus companions, que curiosamente siempre han sido mujeres.

La serie es muy buena, pero os recomiendo que empecéis por la temporada 5 de la serie moderna. En ella se describen las aventuras del undécimo doctor, encarnado por Matt Smith (también protagonista de The Crown), y su companion, Amy Pond, interpretada por Karen Gillan (Jumanji, Guardians of the Galaxy). La producción es mucho mejor que en temporadas anteriores, así como la trama en general. En esta serie podréis apreciar diferentes acentos (Karen Gillan es escocesa, mientras que Matt Smith, por ejemplo, es de Northampton, en East Midlands), lo cual siempre os vendrá bien para hacer oído.

Downton Abbey

La majestuosidad de la época, el ingenio de los guionistas y su magnífico elenco hacen de Downton Abbey una serie inolvidable, pero también accesible y muy útil en el proceso de mejora de vuestro nivel de inglés. Además, ¿quién no ha soñado alguna vez con vivir en esa casa? Si os acaba gustando la serie, siempre podéis visitar Highclere Castle y revivir las escenas más memorables de la serie.

La trama se centra en la vida de la aristocrática familia Crawley, liderada por Lord Grantham, conde de Downton, y los criados que trabajan en su casa, Downton Abbey. A pesar de tener tres hijas, Lord Grantham precisa de un heredero barón para que ocupe su lugar cuando él ya no esté presente. Tras la muerte del futuro heredero en el hundimiento del Titanic, el siguiente en la línea de sucesión resulta ser un primo lejano del conde, Matthew Crawley, proveniente de la clase media y abogado de profesión.

Entre las caras conocidas se encuentra Maggie Smith, que encarna a la profesora McGonagall en la saga de Harry Potter. Sus diálogos son los mejores, seguro que os quedáis con muchas de sus frases para después plasmarlas en vuestras redacciones o, mejor aún, en la sección de speaking. El acento de los personajes, en especial de los de clase alta, es muy claro y preciso, por lo que no tendréis problemas en este sentido. Los diálogos son fluidos pero no demasiado rápidos. Quizá el vocabulario puede llegar a ser algo complejo al principio, pero os acostumbraréis a las expresiones que emplean a lo largo de la serie, y sobre todo a la gramática.

Friends

¿Qué puedo decir de Friends? Se podría decir que es la precursora de todas las series de comedia que tenemos en la actualidad, y nunca nos cansamos de verla. La serie narra las divertidas aventuras de seis amigos en la ciudad de Nueva York: Rachel (Jennifer Aniston), Monica (Courteney Cox), Phoebe (Lisa Kudrow), Ross (David Schwimmer), Chandler (Matthew Perry) y Joey (Matt LeBlanc). La mayor parte de sus anécdotas tienen lugar en The Central Perk, la cafetería a la que siempre acuden para encontrarse y en la que Rachel empieza a trabajar.

A la serie no le falta nada: tiene humor, es breve en cuanto a la duración de sus capítulos y las tramas son muy originales. El acento de los personajes es estadounidense estándar, por lo que no tendréis problema con ello, pero la rapidez de los diálogos en varias ocasiones sí os puede resultar complicada, así como algunas de las bromas y juegos de palabras que se emplean en los diálogos.

How I Met Your Mother

Si poca duda me cabe de que conocíais Friends, igualmente estoy segura de que mínimo os debe sonar How I Met Your Mother, una de las sitcoms más celebradas y seguidas en el mundo. A lo largo de sus 9 temporadas el entrañable grupo de amigos formado por Ted, Robin, Lily, Marshall y Barney vivirá desternillantes historias y situaciones que te engancharán a poco que seas un amante de la comedia. Esta serie comienza con un Ted que le cuenta a sus hijos lo que fue la historia de cómo conoció a la que sería su esposa y madre de esos niños. No desesperéis por saberlo, la espera será larga… pero os aseguro que merecerá la pena.

La variedad de inglés empleada en la serie es un inglés estadounidense muy estándar y en general fácil de entender, aunque también podréis acercaros al exotismo del acento canadiense gracias al personaje de Robin. Dada su naturaleza humorística, abundan los chistes, referencias culturales y juegos de palabras que pasarán a formar parte de vuestro imaginario, que al mismo tiempo conforman una verdadera cultura para los seguidores de la serie. It’s going to be legen-… wait for it… -dary!

My Life in Film

Si habéis visto Sherlock, uno de los actores que salen en esta serie os sonará. Se trata de Andrew Scott, que da vida a Moriarty en la famosa serie detectivesca. Sin embargo, en esta otra tiene un papel bien distinto. Otra cara conocida es la de Kris Marshall, actor que figura en el elenco principal de Love Actually.

Art es un aspirante a director de cine que se mete en bastantes líos con el único objetivo de inspirarse y crear nuevas tramas, a pesar de que nunca consigue terminar ningún guión o rodar ninguna película. Jones, su compañero de piso (interpretado por Andrew Scott), sufre todos los infortunios creados por su amigo. La novia de este último, Beth, no soporta a Art, para quien el sentimiento es mutuo.

My Life in Film, emitida en el año 2004 en BBC Three, es bastante divertida y fácil de seguir. Solo cuenta con seis episodios, los cuales podéis encontrar sin ningún problema en YouTube. Las tramas son simples, el acento es británico estándar y si tenéis problemas con la posible rapidez de los diálogos, siempre podéis descargar los subtítulos.

Pretty Little Liars

Llevo siguiendo esta serie desde que empezó, hace ya casi siete años. Conozco a mucha gente que ha desistido porque la trama se ha vuelto demasiado complicada y, en ocasiones, poco creíble, pero a mí me sigue enganchando tanto como el primer día.

Pretty Little Liars sigue a cinco chicas: Alison, Aria, Hanna, Spencer y Emily. La primera de ellas desaparece una noche de verano. Un año después, y todavía sin rastro de ella, las cuatro amigas restantes empiezan a recibir mensajes haciéndoles ver que muchos de sus secretos no son tan «secretos», todos ellos firmados por una persona anónima que se hace llamar -A. Las chicas asumen que debe ser Alison, puesto que solo ella sabía de estos secretos, pero poco después aparece su cadáver y, aun así, las cuatro protagonistas siguen recibiendo mensajes. La trama da varios giros inesperados en sus siete temporadas, por lo que no os la podéis perder.

En términos lingüísticos, el vocabulario empleado en la serie no es demasiado complicado, así como la dicción de los personajes y el ritmo al que hablan. El acento de los actores es estadounidense estándar, con ligera variación en algunos casos.

The Tudors

A muchos os sonará el nombre de Enrique VIII, probablemente por el hecho más conocido en la vida de este personaje histórico: tuvo seis mujeres e hizo ejecutar a dos de ellas. Aunque en sus numerosos retratos se puede apreciar su verdadero aspecto, en la ficción insisten en representarlo como un atractivo hombre de ojos azules y constitución delgada. Este es el caso en la serie The Tudors, en la que el actor Jonathan Rhys-Meyers da vida al malvado y caprichoso monarca.

En sus cuatro temporadas seremos testigos de cómo conoció, convivió y finalmente se deshizo de sus mujeres, empezando por Catalina de Aragón y terminando con Catherine Parr. Para mí, lo verdaderamente interesante viene de la mano de Anne Boleyn, encarnada por la actriz Natalie Dormer (Game of Thrones, Elementary, The Hunger Games), por lo que os recomiendo que no os lo perdáis. La pronunciación es clara y los diálogos son fluidos, aunque no rápidos en demasía.

*Actualización 2019*

Pretty Little Liars: The Perfectionists

Recogiendo el testigo de su «serie madre», Pretty Little Liars, este spin-off cuenta con todos los ingredientes necesarios para engancharte a la pantalla: una trama algo parecida a la que estábamos acostumbrados a seguir en la serie original pero con giros inesperados que nos mantendrán en vilo durante los cuarenta minutos de duración de cada episodio; nuevos y complejísimos personajes a los que debemos sumarles los de Alison DiLaurentis y Mona Vanderwaal; un nuevo escenario, alejado del Rosewood de la costa este y del ambiente adolescente de su predecesora; y, cómo no, un nuevo asesinato.

En esta secuela, Alison DiLaurentis se traslada al estado de Oregón, en la costa oeste, para trabajar como profesora de Literatura en la universidad de Beacon Heights, una institución que se enorgullece de la presión a la que somete a su alumnado. De hecho, la excelencia es el requisito máximo al que se enfrentan los jóvenes con talento que habitan el campus. Tres de estos jóvenes son Caitlin Park-Lewis, Ava Jalali y Dylan Walker, unidos aparentemente por sus vínculos con Nolan Hotchkiss, el hijo de la fundadora de la universidad, Claire Hotchkiss (interpretado por la misma actriz que encarnaba a la madre de Serena Van der Woodsen en la mítica Gossip Girl). Nolan, lejos de ser una buena persona, logra cultivar un gran número de enemigos que, sin duda alguna, tendrían motivos para matarle… pero ¿quién será culpado?

Al igual que ocurría con su predecesora, en esta serie no vamos a encontrar graves problemas que nos dificulten la comprensión. El vocabulario es más que llano, incluso informal, y la sintaxis es sencilla, al igual que el acento de sus personajes: estadounidense estándar.

¡Y hasta aquí la entrada de hoy! ¿Qué os ha parecido esta selección de series? ¿Añadiríais alguna otra? ¿Habéis probado ya alguna y no os convence? Contádmelo en la sección de comentarios, por correo electrónico o en la página en Facebook del blog. 🙂 ¡Espero vuestras sugerencias!

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